Lo confirmó el ministro Ritondo. «Eran delincuentes. Quien negocia con el narcotráfico no puede estar un segundo dentro de la Policía ni dentro del Estado», dijo.
El tiroteo entre policías en Avellaneda tuvo su primer coletazo: fueron separados ocho miembros de la Bonaerense, según confirmó esta mañana el ministro de Seguridad Cristian Ritondo. «Eran delincuentes. Quien negocia con el narcotráfico no puede estar un segundo dentro de la Policía ni dentro del Estado», indicó.
Así Ritondo avaló la trama narco que se teje en torno al tiroteo que terminó con un sargento muerto y dos policías heridos. Esta mañana, el procurador general de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, también avaló la línea de investigación narco.
En diálogo con TN, el funcionario aseguró que «es muy difícil» modificar esos esquemas delictivos en las fuerzas de seguridad, en los que participan «personas inimaginables que decidieron colocarse del otro lado del mostrador».
«En este caso hay un elemento muy grave que es el hecho de que aparece una vinculación probable con los sectores del narcotráfico, que es lo que estamos investigando», agregó.
Conte Grand consideró que «Avellaneda es un área particularmente compleja» y que «el desenlace del tiroteo fue dramático», pero «puso en superficie una cantidad de aspectos que son para destacar» y que son necesarios trabajar para «recomponer la ética en las instituciones de la provincia».
El caso
Una mujer se presentó en una fiscalía de Avellaneda y denunció que varios hombres que decían ser policías la interceptaron y le exigieron plata para no armarle una causa por vínculos con la venta de drogas. Le advirtieron que debía entregarles $ 200 mil. La mujer les dio $ 30 mil y acordó pagarles el resto el viernes por la noche. En el medio se presentó en la Justicia para hacer la denuncia y luego se dispuso el operativo policial, que terminó con un comisario muerto y otros dos policías heridos.
La fiscal María Soledad Garibaldi, titular de la UFI N°4 de Avellaneda, ordenó el operativo ante la hipótesis de que quienes habían extorsionado a la mujer podrían ser policías. Lo hizo con la División Antidrogas Urbanas de la Policía Federal. Se marcaron los billetes que se iban a entregar como soborno y doce policías se distribuyeron en forma encubierta en la estación de servicio.
El viernes a las 21 la mujer se fue a la estación de servicio ubicada sobre el Acceso Sudeste y Madariaga, cerca de un supermercado y del ingreso al centro comercial Parque Avellaneda Shopping. Fue abordada por el capitán Eduardo Angel Franicevich, del gabinete antidrogas, al que le entregó la plata. En simultáneo apareció un Toyota Etios blanco conducido por el comisario Hernán David Martín, jefe del Gabinete de Drogas de la DDI, que quiso embestir a uno de los policías de la Federal. Luego se bajó y se produjo un tiroteo, que terminó con dos efectivos heridos y la muerte de Martín.
La Justicia dispuso la liberación de dos de los tres policías de la Bonaerense que estaban detenidos, tras la declaración indagatoria ante la fiscal Garibaldi. Se trata del subcomisario Luis Edgardo Otero y del subayudante Silvio Ricardo Vergara, ambos del Gabinete Antisecuestros de la DDI Lanús-Avellaneda, que llegaron media hora después de la entrega de plata. Sigue preso Franicevich, principal acusado de pedir dinero a la mujer para evitar que le armen una causa.
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