En el Cayo Big Mayor, más conocido como la isla de los cerdos, habitan los animales desde hace décadas. La inexplicable existencia de los mamíferos en estas playas que forman parte del distrito de Exuma es el imán para que los aventureros llegan hasta el lugar.

Ni delfines, ni orcas, ni tiburones. La tendencia ahora es nadar con chanchos que viven inexplicablemente desde hace décadas en un archipiélago en Bahamas. Las exumas son 365 islas e islotes que se extienden en un perímetro de 193 kilómetros, siendo las dos principales Great Exumas y Little Exumas. Dentro de los cayos, «La isla de los cerdos», el Cayo Big Major, es donde habitan estos animales junto a gallinas y sin la presencia del hombre. El lugar se volvió sensación en los últimos años no solo por sus playas de arenas blancas, sino por la posibilidad que tienen los turistas de darse un chapuzón junto a los animalitos.

Big Major Cay se volvió la playa del momento porque los visitantes quieren ver con sus propios ojos la rareza del paraíso de los cerditos. El valor agregado es que son muy amigables, se dejan acariciar y conviven perfectamente con las personas tanto en las playas como en el agua.

Cómo llegaron hasta ahí

Según cuenta una leyenda, los cerdos habrían sido dejados en el cayo por unos marineros con la intención de volver a comérselos, cosa que nunca ocurrió.​ Según esta versión, los animales habrían sobrevivido gracias a los restos de alimentos que tiraban al mar los barcos que pasaban por allí.

Otra teoría apunta a que los animales sobrevivieron a un naufragio y pudieron llegar nadando hasta a la orilla del cayo. Y los más escépticos afirmar que los cerdos formaban parte de un plan empresarial para atraer turistas a esta isla de las Bahamas.

El paraíso tropical al que muchos denominaron «La isla de los cerdos» se convirtió en destino de instagramers que suben sus fotos mientras viven la experiencia única rodeados de cerditos.

Una de las famosas que hace algunos años marcó tendencia con su foto con cerditos es la modelo Irina Shayak. La modelo compartió en 2014 una imagen en la isla paradisíaca en su cuenta de Instagram.

Pero no todo es tan idílico en esta playa, o al menos para los cerdos, según indican algunos medios internacionales, hay quien aseguran que algunos turistas no tratan bien a los animales y los manipulan de manera incorrecta para conseguir la mejor selfie. Por eso, el gobierno de Bahamas planea regular el acceso a la isla para controlar a los visitantes y asegurar su seguridad.